Qué pesados.

El tal Toni Freixo, portavoz del Fútbol Club Barcelona, vuelve a la carga con el caduco tema de la sede de la final de la Copa del Rey. Después de que el Real Madrid dejara constancia por activa y por pasiva que no iba a ceder su estadio a la fiesta del antiespañolismo que volverán a montar los dos clubes, los dirigentes culés siguen pidiendo explicaciones e intentando forzar a Florentino a cambiar de opinión.

El que quiera jugar aquí, que fiche por el Real Madrid

"Hemos vuelto a plantear que era la mejor opción pero el Madrid ha alegado que tiene que hacer unas obras". Tanto   el Barcelona como el Athletic de Bilbao, saben desde el primer momento que el Madrid no cedería el Santiago Bernabeu para la final, y siendo propietarios del estadio, creo que es un decisión totalmente lícita. Mucho se ha estado hablando de que si una final en el Bernabeu dignificaría la copa, o de que si es el mejor estadio, pero una vez descartado ese escenario, no es normal que se tiren un mes dándole vueltas a que quieren jugar ahí en lugar d trabajar en otras opciones.

Dignificando la competición.

Manda huevos que un club que ha protagonizado dos de los hechos más vergonzoso de la historia de la competición (negarse a jugar la vuelta de una semifinal ante el Atlético de Madrid y el espectáculo bochornoso de la final de hace dos o tres años con la pitada al himno), se preocupe ahora de dignificar la competición. Si realmente piensan eso, si realmente están convencidos de que el Bernabeu es el mejor escenario para la final por  aforo, pues que soliciten que la final sea siempre ahí y listo, lo que pasa es que lo del aforo sólo es una escusa, aún escuece en Barcelona la noche de los aspersores y el quedarse a las puertas de jugar la final de la Champions en el Bernabeu, y esa espinita la tienen clavada.